MURIÓ BERNARDO NEUSTADT

Casi podría decirse –pese a los detractores, que los tuvo y muchos, como confirmando su valía– que Bernardo Neustadt murió en “su” día. Como que su fallecimiento se produjo precisamente el día del periodista. Esto es, este sábado (7), casi como un símbolo, en esta caótica Argentina de hoy en día, como para que se lo recuerde perennemente.
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Podrá disentirse respecto de sus posturas, que lo identificaron no pocas veces con los poderes de turno. No podrá negársele, aún así, una indiscutida capacidad, puesta de manifiesto todo el transcurrir de su carrera como comunicador. Brilló con luces propias en el periodismo gráfico, en la radio y en la televisión. Despuntaba el vicio, si así puede decirse, escribiendo su columna para Internet.
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No es éste el lugar para hacer biografía del polémico Bernie. Murió a los 83 años. ¿Lo dejamos ahí?. Eso sí, con un respetuoso homenaje, porque dijo muchas verdades. Y tanto es así que es oportuno sugerir la lectura de su última columna (www.bernardoneustadt.org/contenido_1081.htm), firmada este viernes (6). ”Les recomiendo hablar con sus hijos de este momento que vive el país”, citó, a manera de final, y se despidió “hasta el lunes”.