CARTA ABIERTA

A las autoridades locales, provinciales y usuarios del servicio de agua potable de Bahía Blanca y la región.


Cuidemos nuestro recurso, es un compromiso de todos

Ya por el año 1997 se percibe una inquietud en las distintas esferas oficiales por la situación que se presiente y que es bien transmitida en la “Síntesis de los Estudios de Prefactibilidad del Plan Integral de Abastecimiento de agua a Bahía Blanca”[1], cuya actualización en ese año manifiesta en su prólogo:

“Las fuentes de abastecimiento a Bahía Blanca, Gran Bahía Blanca y Punta Alta son escasas y requieren una gran inversión en transporte y/o extracción. (...)

El crecimiento esperado de acuerdo a las grandes inversiones previstas para la región requiere que se garanticen esas fuentes y que se priorice su uso para el consumo humano y crecimiento de estas ciudades frente a otros usos.”
Hoy se requiere de un escenario de gestión que contemple soluciones inmediatas respecto a la adopción de una fuente alternativa de abastecimiento. Pero, los responsables del servicio antes de invertir en tecnología para captar agua tendrían que pensar en renovar los sectores de red de distribución para disminuir las fugas, detectar, controlar y reparar las pérdidas de agua en la red.

Los usuarios no alcanzamos a entender por qué el sector industrial se ofrece tan gentilmente a solventar la obra de construcción de la planta potabilizadora sobre el arroyo Napostá y no se ocupa de encontrar su propia fuente de agua.

Tampoco entendemos por qué no se cumple con la reglamentación vigente, si el artículo 25 del decreto provincial número 878/03 establece que cuando el suministro para consumo humano se encuentre comprometido, éste debe privilegiarse antes que el industrial.

El municipio habla de aplicar “multas” a aquellos que derrochen el agua, más allá de que no le corresponde dicha función ¿no deberían empezar por casa?

Apelamos al compromiso a nivel provincial, de ejercer la función de control y regulación en defensa del consumidor, asegurando calidad y cantidad de agua, y las obras de infraestructura necesarias. Al municipio le pedimos que asuma ante el concesionario la figura del usuario al cual representa y exija al nivel provincial que cumpla su función de órgano de control y regulación.

Por último, los usuarios debemos presionar para lograr la representación en el órgano de control y regulación para lograr transparencia de funcionamiento y generar una actitud participativa.

Es responsabilidad de todos, no dejemos que unos pocos manipulen un recurso tan valioso como es el agua.

Bahía Blanca, 6 de octubre de 2009.

Mesa Municipal del Partido Encuentro por la Democracia y Equidad Bahía Blanca (EDE).

[1] MOPBA (1991)